Los niños del colegio ADA, Greenvalley y Quetzalli (en su taller vespertino), realizaron y probaron el uso de energías alternativas, a través de la construcción de una cocina solar, la cual funciona como un horno aprovechando la energia del sol. Con este horno se puede cocinar una gran variedad de alimentos sin utilizar gas o electricidad, de esta manera no se genera contaminación al ambiente.
El uso de este tipo de energías consideradas como limpias, ayuda a evitar entre otras cosas el "CALENTAMIENTO GLOBAL".
Los niños que participan en el Instituto para el Estudio de la Biosfera estan concientes de los problemas ambientales y son parte activa de la solución.